133

Si las palabras pesaran, si te dolieran como duelen los callos en los pies, si te ardieran como cortaditas en el escroto, si te mordieran como pirañas en los tobillos, si te besaran como sanguijuelas en el cuello, si te rasguñaran como gatas de barrio sucio, si te pegaran, si te pegaran, si te pegaran de verdad, entonces ya no volverías a leer, ya no volverías a entender, ya no volverías a saber de mi.

132

Este párrafo no iba a hablar de ti, iba estar dedicado a pensar en alguien mas, mas bien a no pensar, simplemente a escribir como lo hago siempre, por inercia, pero en este momento me doy cuenta que no lo pude evitar, desde un inicio cuando dije: Este párrafo no iba a hablar de ti, iba a estar dedicado a pensar en alguien mas, mas bien a no pensar, simplemente a escribir como lo hago, por inercia, pero en este momento me doy cuenta que no lo pude evitar, desde un inicio... ya había perdido.

131

El escupir al cielo es valiente de mi parte, aun sabiendo que al final solamente caerá de nuevo en mi cara, cerrare los ojos, pensare que tal vez no conseguí lo esperado, que soy un idiota, que nunca he cambiado y esperare a que mi insulto al señor sol se me regrese... tal vez usando lentes obscuros pueda sonreír.

130

-¿Por que estamos aquí?

-Es una sorpresa

-Sabes que no me gustan las sorpresas, mejor vamonos.

-Ésta si te va a gustar, solo cierra los ojos.

Poniendo las manos en sus ojos mientras decía esto caminaron unos pasos mas, abrieron una puerta y al entrar le destapo los ojos.

-¡Sorpresa!

-...

-¿Que pasa? ¿no te gustó?

-La gente no cambia.

Diciendo esto se marchó.

129

Si pudiera mirar a través de la piel, si pudiera encontrar el sabor de tu pelo, de tus dedos, de tu boca, de tus ojos, entonces yo... yo sería taquero. 

128

Universos e infinitos en tus ojos, me miras y me absorben al momento de mirarlos, espacio y tiempo se disuelven para quedar hecho algodón, un trocito de algodón volando en la nada.

127

Te levantaste después de varios silencios, te despediste dejando un par de hojas en blanco a medio terminar y un ave de papel sobre la mesa (que por cierto no voló, solo me miraba con esa cabeza sin ojos), antes de partir me pediste un vaso de agua, para estar bien hidratada en el camino, te lo di, terminaste de beber hasta la ultima gota y me pediste otro y otro y otro mas, al final parecías camello, nada te iba a deshidratar, el vaso lo dejaste en la mesa y emprendiste tu rumbo, te acompañe hasta el umbral del portal y ahí me despedí, regrese un poco desorientado por no saber que significaba todo esto, tome el vaso que habías dejado en la mesa para llevarlo al fregadero y por casualidad lo olí... olía a ti, después de tantas veces beber, tu olor se quedo aquí, no lo iba a lavar, me serví un poco de agua, hasta donde pudiera meter lo suficiente mi nariz y así me fui, oliendote antes de dormir.

126

Da uno, da dos, da tres... da mas de dos, esa sonrisa detrás de un tapabocas me gustó y aun que siempre pase lo mismo, de cuando tiempo atrás lograba entablar alguna conversación, era súbitamente cortada por mi intensidad... hola! que tal? como te llamas? me gustas! ya se, yo a ti no... ok, adiós y regresaba al uno, al dos, al tres, al dos otra vez, pero ya sin la emoción.

125

-Cuentas saturadas de caras largas, seguimos debiendole al destino unas cuantas patadas en el culo.

Me decía el viejo, sentado en aquella esquina sucia.

-No vuelvas por donde ya pasaste, por que después te pueden confundir y no es agradable, a mi la vida me confundió con alguien que no era, ¿Crees que me merezco estar aquí? ¡No! Yo debería ser el jefe de las cuentas de caras largas... 

Le dio un trago a la botella y me dijo:

-Vete, me quitas mi tiempo.

Suspire, deje una moneda en sus pies y al voltearme para seguir mi camino,tomo la moneda y la aventó, estrellandola en mi cabeza.

124

Escribo, escribo, escribo, escribo, escribo escribo escribo sin poner mas comas ni puntos por que me los como en el camino ya no quedan mas galletas y la bolsa esta vacía ahora solo quedan estas pocas letra

123

-Escucha...

-¿Escucho que?

-¿No escuchas?

-No, no escucho nada.

-¿Como no? !Se escuchan gritos¡

-¿Gritos? ¿De quien?

-No se, ¿Como quieres que sepa?, solo los escucho... están sufriendo y no son solo 2, son muchos.

-¿Como cuantos?

-!Tampoco puedo saber eso¡... Tengo miedo, creo que vienen por nosotros y !Tu no escuchas nada¡.

-Espera... escucho algo...

-¿Ahora me entiendes?

-Pero escucho algo así como un caracol.

-¿Un caracol? Los caracoles apenas y hacen ruido, ¿Como vas a escuchar un caracol?

-Bueno no un caracol exactamente, estoy escuchando como alguien sopla a través de un caracol, al estilo prehispánico, ¿Me entiendes?

-Si, ya se cual... ¿y los gritos?

-!Ah¡ esos no los escucho.

De pronto, se escuchan unas llaves tratando de abrir la cerradura de la habitación blanca.

-¿Lo ves? !ya vienen por nosotros¡

Mientras decía esto, abriendo la puerta apareció una mujer de falda, completamente vestida de blanco llevando una charola plateada en las manos y mirando a los que se encontraban sentados en un rincón les dijo:

-Es hora de sus medicinas muchachos.

122

-No tengo la menor idea de como metiste la cabeza ahí y la verdad no quiero saber.

-Ni yo, solamente quería mirar del otro lado.

-¿Y por que no le diste la vuelta idiota?

-Es que es otra perspectiva.

-¿Otra perspectiva?, lo que pasa es que eres estúpido, nadie mete la cabeza en lugares donde quizás ya no la puedas sacar.

-Cuando salga no digas que no te lo advertí, ¡Te voy a dejar sin dientes!

-No estas en posición de amenazarme.

-¿Ah no?...

-No

-Ok, pero ya sácame por favor.

121

Piedras en los bolsillos para sentir algo de peso, espinas en los zapatos para que el caminar cueste un poco mas de trabajo, los perros mordiendome la suela y las moscas parandose en mi cabeza, con cada paso pierdo un trozo mas, en vez de migajas dejo mi cuerpo en el camino, la cuestión es que al final cuando encuentren mi ultima pieza, me tendrán que armar otra vez pero las aves se habrán llevado ya mucho de mi.

120

Resaca, re saca, reza ca, res acá, re-sa-ca, respiro profundo... mejor no lo pienso dos veces, el baño me llama, la cama me espera, mi almohada me abraza y aun que diga que no volveré, ahí nos vemos la próxima vez... ¡Salud!

119

Y un ataúd se abrió, otro mas se cerró, sin dejar escapar al muerto, un niño corrió hacia la ventana y dejo caer el vaso.

-¡No llores!

Le dijo una voz desde afuera.

-¡No llores, por que cada gota que derrames es una perdida mas para ti.

Después de eso, salió y no encontró a nadie, pero en vez de llorar, cortó una flor para dejarla sobre su pecho, sin derramar una sola lagrima desde entonces.

118

Raspando esa mesa de madera, donde solíamos comer, arañando las sabanas blancas que nos solían cubrir, todo pasa, todo se desgasta, ni el mas pequeño de los detalles sobrevive al paso del tiempo, solo estamos el plato, el cuchillo, la mesa y yo... yo, la mesa, el cuchillo y el plato estamos, esperando la comida que alimenta el alma.

117

La risa actualmente paso a ser el intervalo de dos dedos oprimiendo botones, no importa si estas llorando detras de la pantalla, siempre podras mostrarte feliz en las palabras... JAJAJAJA

116

El zapato que estornuda no dice ni "pio" solo se queda apestoso en el rincon buscando su par, para despues hecharle un poco de talco y ocultar el olor que lo hace estar ahí.

115

Apachurrado estaba desde que lo dejé, apachurrado y desinflado así como yo lo dejé, lo guarde debajo de mi cama y empolvado, apachurrado y desinflado lo encontré.

114

Después de un silencio que era todo menos incomodo le dije:

-Nunca pensé sentirme así otra vez.

-¿Así como?

-Así, mira.

Le tome la mano y puse sus dedos blancos y delgados con esas uñas a medio despintar sobre mi pecho y le dije:

-Así, ¿sientes?

Ella se acerco un poco, como tratando de escuchar y luego me dijo:

-Si, escucho tus latidos un poco acelerados.

-No son latidos

-¿Ah no?

-No, son golpes

-¿Golpes?

-Si, son los golpes que se da mi corazón a la hora de bailar... así me siento, con el corazón bailando de felicidad.

Y ella sonriendo, solo me abrazo.

113

Por las manos, por los dientes, por la boca, todo el mundo se voltea y mira de reojo como crecen las hojas, el pájaro canta, el ratón se escabulle y tus manos se detienen... ¡No me toques! ¡No me toques! No es lo mismo que otros días, la corteza se desgasta, por eso ahora la sabia escurre lentamente hasta la raíz, esa raíz, la raíz de todos mis problemas.

112

-Y sabia que llegaría este día, desde el momento en que te vi caminar por el pasillo, desde la primera vez que te bese, sabia que iba a extrañar esos labios, que siempre llego al punto de sentirme enclaustrado para después extrañar la mas bella de las prisiones, como hace el preso que extraña su celda, pensando en cometer algún delito para regresar, pero no hay vuelta atrás, se que también este estado se me pasara, por que siempre me pasa, es una historia que no tiene final, el empezar de nuevo a contarla es predecible su conclusión, la resolución es simplemente dejarla pasar.

La mujer policía me volvió a poner las esposas y me dijo:

-Callate, siempre es igual, todos ustedes creen que me voy a enamorar con poesía barata escrita en papel de baño, ademas nunca me besaste.-

Y me volvió a encerrar.

111

Hoy por la mañana escuche una voz que emanaba de adentro, rompiendo la estancia del recuerdo inundado en seriedad, con miedo al futuro por no saber como será, siguiendo el trazo pensado y meditado por todos... y no verlo igual, esperando que todo y todos tomen su lugar, sin darse cuenta que ya no hay vuelta atrás.

110

Y me dijo muy seria:

-¡Vete!

y yo me fui dandole tiempo al tiempo para olvidar, dando lugar al sueño para volverla a encontrar.